lunes, 30 de enero de 2012

El modelo a seguir

Eran casi las dos de la madrugada en Melbourne cuando Djokovic lograba hacerse con el título del Open de Australia después de 6 horas de un partido que pasará a la historia como la final más larga de un Grand Slam. Se imponía a Nadal en 5 sets 5-7, 6-4, 6-2, 6-7 y 7-5.